A día de hoy, todo el mundo usa alguna red social. Por eso, si tienes una empresa es prácticamente obligatorio estar presente en ellas creando contenido. Eso sí, mucho cuidado con las malas prácticas en redes sociales que hay que evitar a toda costa.
Comunicar por este tipo de plataformas puede parecer sencillo, pero da un paso en falso y la reputación de tu negocio cambiará de forma drástica. Por eso, te contamos una serie de consejos para que no cometas ningún error en las redes de tu negocio.
Olvídate del spam
El spam, para entendernos, es una forma de comunicación no solicitada que se hace de forma masiva. En el caso de las redes, se traduce en hablar por todas partes sobre tu producto o servicio, anunciándolo de forma que puede resultar molesto al resto de usuarios.
Debes evitar esta práctica a toda costa, porque no hace ningún favor a tu empresa y lo único que conseguirá es generar emociones negativas del público hacia tu marca.
Nada de faltas de ortografía
No escribirías un correo electrónico o una carta para un cliente con faltas ortográficas, y las redes no son menos. Tener errores de escritura es inadmisible en el contexto virtual y dará a tus seguidores una sensación de poca profesionalidad.
Además, la gente se fija mucho en este tipo de detalles y si ven que tienes muchas faltas, puedes convertirte en un hazmerreír y en una fuente de burlas o, incluso, memes.
Deja de obsesionarte con el número de seguidores
Tener un gran número de seguidores suele ser bueno para tu negocio. Sin embargo, esta cifra no es lo más importante y no debes obsesionarte con ella. Es mucho más relevante tu nivel de engagement, es decir, cuánto interaccionan tus followers con tu contenido: el número de me gusta que dan, cuántos comentarios escriben, si comparten tus publicaciones… En definitiva, crear una comunidad.
Planifica tu contenido
Es vital planear tus posts en redes sociales. En una cuenta personal, es normal subir fotos que te gustan o parecen graciosas. Pero en el caso del perfil de tu empresa es otra historia.
Hay que tener en cuenta a qué target va dirigido tu contenido y planificar qué publicar en función de ello. Para organizarte mejor, puedes emplear gestores que suban automáticamente tus publicaciones a las mejores horas para llegar a más público.
No te acerques al ‘followback’
El ‘followback’ o ‘te sigo y me sigues’ era una técnica muy popular hace algunos años para conseguir ganar followers fácilmente. Pero a día de hoy, es un grave error utilizarla.
Con esto vas a conseguir lo que se conoce como seguidores de cortesía, es decir, personas que no van a darte ningún tipo de engagement y solo han aceptado este acuerdo por amabilidad. No se ajustan a tu target ni van a interesarse en lo que hagas, así que debes evitarlos a toda costa.
Responde a los mensajes
Un fallo muy grande que puedes tener es el de usar tus redes exclusivamente para subir contenido. Tus perfiles son un medio de comunicación con los clientes, por lo que hay que contestar sus mensajes, dar la sensación de que estás ahí y crear una conexión con ellos.
Si te olvidas de responder a sus comentarios, va a parecer que solo te interesa hacer publicidad. Has de generar confianza y cercanía, diferenciarte del resto de empresas.
También es importante que mantengas la calma con los comentarios negativos y no te dejes llevar. Responde de forma relajada, sin perder los papeles para no echar más leña al fuego.
Demasiados Hashtags
Utilizar hashtags en tus posts es una práctica común, pero necesitas tener cuidado con su cantidad. Poner muchas etiquetas hará que tus textos sean poco legibles. Además, el número que puedes emplear varía en función de cada red social. Por ejemplo, en Instagram puedes usar hasta 30 hashtags, pero en Facebook, LinkedIn o Twitter, se recomiendan tres o cuatro.
Asimismo, los hashtags deben estar relacionados con tu contenido y tu marca, ya que quieres posicionarte en el mercado correcto y atraer a tu público objetivo.
No compres seguidores
Puede resultarte tentador comprar seguidores para que tus números crezcan rápidamente sin esfuerzo. Pero es una práctica muy mala que lo único que consigue es empeorar tu reputación on line.
Llama mucho la atención que una marca con una gran cantidad de followers tenga pocas interacciones, genera poca confianza por parte del usuario, que pensará que esas cifras no son reales.
Además, 1.000 seguidores falsos son peores que 100 verdaderos, porque son los que nos van a dar engagement y pueden convertirse en clientes potenciales.
Ten cuidado con el tono
Abusar del tono corporativo en redes puede dar la impresión de que, en vez de estar tratando con una persona, lo estás haciendo con un robot que solo quiere vender. De igual manera, si eres muy cercano con tu público, parecerá que eres poco profesional y no te tomas tu trabajo en serio.
Es por eso que debes cuidar mucho tu tono y tu lenguaje, adecuarlo al sector de tu empresa. No vas a utilizar chascarrillos si tienes una gestoría, ni vas a hablar como un catedrático en la cuenta de un bar.
Aplica lo aprendido
Como ves, manejar las redes sociales de un negocio no es un camino de rosas. Pero si sigues estas recomendaciones, correrás menos peligro de cometer errores y tu actividad on line irá sobre ruedas. Eso sí, si necesitas ayuda, no dudes en contactar con VINCUSYS y te daremos asistencia de la mejor forma posible.
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